El dinamismo y simplicidad del Estudio SANAA
La arquitectura japonesa siempre se ha distinguido por ser única y sigue deslumbrando en la actualidad. Si hablamos de un referente del país nipón, uno de los despachos que mejor lo representan es el Estudio SANAA. A la cabeza se encuentran Kasuyo Sejima y Ryue Nishizawa, ganadores del Premio Pritzker 2010.
Su estilo es inconfundible. Genera una arquitectura que respeta las raíces orientales, pero que al mismo tiempo incluye detalles occidentales. Sus diseños innovadores, con formas geométricas sumamente sencillas, aunadas a la composición de materiales, son un sello distintivo de todas sus obras. De igual manera que la simplicidad y transparencia.
Sin embargo, si alguna pudiera definir el estilo arquitectónico del Estudio SANAA, sería el New Art Museum. Ubicado en la ciudad de Nueva York y terminado en 2007, este proyecto rompe con el esquema del barrio de Bowery. No obstante, esta distinción no es agresiva gracias a la simplicidad y claridad de la construcción. Una composición de cubos de diferentes tamaños y alturas se apilan con pequeños pero significativos cambios.
El New Art Museum muestra una arquitectura de museos con un concepto claro y un fuerte impacto. La apariencia de la fachada también juega un importante papel. Con una capa de malla de aluminio sobre las paredes blancas, el museo proporciona diferentes reflejos de luz.
Por otro lado, su interior consta de cuatro galerías públicas, un auditorio, un centro de educación, oficinas y un salón de usos múltiples. Al desplazar los cubos, todas las partes reciben luz natural. Mientras que por la noche, las luces artificiales le dan vida a través de aberturas ocultas que destacan los espacios y les otorgan ligereza.
Así, la obra de este par de arquitectos inteligentes y críticos genera una sensación de dinamismo que inspira a las siguientes generaciones.