Conoce más de la historia de la arquitectura gótica, creadora de destacados monumentos arquitectónicos.
El Gótico es el estilo arquitectónico que surgió en Francia durante el siglo XII, y que predominó en Europa occidental hasta la mitad del siglo XVI. Se caracteriza por la construcción de grandes catedrales, con estructuras cada vez más ligeras y más altas, basadas en el arco apuntado o arco ojival, la bóveda de crucería, y ventanales ricamente decorados.
Su historia tuvo un recorrido paralelo predominante en Francia y en Inglaterra. En cada uno de estos países se reconocen tres etapas principales:
Arquitectura Gótica en Francia
- Francés temprano (Early French style).
La primera de las tres fases de la arquitectura gótica francesa. Comprende los siglos XII y XIII.
Se reconoce por los arcos apuntados y los trazos geométricos. Nuestra Señora de París está construida bajo este estilo.
- Gótico Radiante (Rayonnant style).
Es la segunda fase del gótico en Francia. Comienza a finales del siglo XIII y predomina hasta bien entrado el siglo XIV.
Utiliza ventanas circulares y tracería radial, de ahí su nombre. Su primera manifestación es la Catedral de Amiens y una de sus mejores muestras es Sainte-Chapelle de París.
- Flamígero (Flamboyant style).
Va del siglo XIV a la mitad del XVI. Toma su nombre de la apariencia de la tracería en las ventanas.
Los detalles son intrincados e incluso el espacio interior aparece más complejo. La Catedral de San Gaciano en Tours corresponde a este periodo del gótico francés.
Inglaterra
- Inglés temprano (Early English style).
Es el correspondiente en Inglaterra. Destaca por las ventanas lanceoladas (altas y estrechas) y la tracería.
Uno de sus mejores ejemplos es la Catedral de Canterbury.
- Decorado (Decorated style).
Coincide en el tiempo con el Rayonnant. Es el momento de la tracería más rica y las bóvedas ornamentadas con mayor detalle.
La técnica del corte, perfilado, y pulido de la piedra alcanza su esplendor. La King’s College Chapel, en Cambridge, es uno de sus mayores logros.
- Perpendicular o Rectilíneo (Perpendicular style).
El gótico inglés culmina con su fase perpendicular y rectilínea. Es contemporáneo del flamígero francés pero contrario en cuanto a su destino geométrico en lugar de orgánico.
Las bóvedas de abanico hacen su incursión en la arquitectura inglesa; son especialmente admirables en la Abadía de Bath.
La magia del Gótico consiste en aligerar la piedra. A pesar de estar construida casi de manera exclusiva con este material que asociamos a la solidez y el peso, la arquitectura gótica es liviana, altísima, y vertical: resulta evocadoramente celestial.